Los neumáticos soportan el peso de su auto, ¿correcto?. Incorrecto, es la presión de aire dentro del neumático que soporta el peso. Es necesario mantener una buena presión de aire para que el neumático provea la maniobrabilidad, tracción y durabilidad esperada de su diseño.
Muchas personas olvidan revisar periódicamente la presión de aire, para asegurarse que las influencias del tiempo, cambios de temperatura ambientales o agujeros pequeños, no hayan alterado la misma.
La estructura molecular del caucho utilizado para fabricar neumáticos tiene una apariencia de cilindros de espagueti cocinados y pegados. Esta composición molecular es estirada y regresa a su estado relajado cada vez que la llanta rueda (800 veces por milla).
La presión de aire comúnmente encontrada en autos es de 30 a 35 psi (pound per square inch, libra por pulgada cuadrada) y un poco más alta en camiones ligeros. Esta presión de aire esta constantemente tratando de escapar a través de los espacios microscópicos entre las moléculas del caucho, por eso la necesidad de revisar la presión e inflar las ruedas regularmente.
Si todas las condiciones permanecen constante, la presión de aire bajara 1 psi por mes. Así que, en dos o tres meses tendremos una reducción de 2 y 3 psi respectivamente.
Los neumáticos son inflados normalmente con aire (una combinación de aproximadamente 78% nitrógeno (N2), 21% oxígeno (O2) y 1% argón (Ar) y otros gases) obtenido en gasolineras. Desafortunadamente, el uso de aire permite humedad y la cantidad de vapor de agua en el aire varía de establecimiento en establecimiento, estación del año y las condiciones climáticas. A pesar que encontramos aire en todos lados, encontrar una fuente de aire comprimido se hace cada día más difícil y ni mencionar aire comprimido seco (sin vapor).
Para mantener la presión de aire más constante, la misma debe ser revisada con más frecuencia. Una vez al mes y antes de un viaje largo debe ser el mínimo; una vez a la semana sería lo ideal. Esto permitirá recuperar la presión de aire perdida a través del tiempo y descubrir si hay algún escape debido a un pequeño pinchazo, lo cual ayudará a prevenir cualquier daño a la estructura del neumático.
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