El término "reventÓn" se utiliza generalmente para describir un neumático que explota, acompañado con una perdida rápida de presiÓn de aire. Se puede asumir que la mayoría de reventones se debe a extrema presiÓn de aire en una parte débil de la construcciÓn del neumático, pero la razÓn principal es completamente lo opuesto. La mayoría de reventones son causados por poca presiÓn de aire, lo cual permite que el neumático sobrepase su punto de elasticidad y se recaliente, hasta el punto que el caucho se separa de los cordones de telas y los refuerzos de acero.
La causa de estos reventones es usualmente el sobrepeso en el vehículo, algÚn impacto (puede ser inmediato o retrazado, dependiendo se la severidad del impacto), un corte que permita una salida rápida de aire o un pequeño agujero que no sea detectado y permita salir aire poco a poco. Reventones son causados por cualquier situaciÓn que permita salir el aire y no permita que el neumático soporte el peso del vehículo.
A medida que la tecnología mejora y reduce los reventones, estos se convierten en una sorpresa para el conductor cuando suceden y representan un peligro. Independientemente de la causa del reventÓn la reacciÓn del conductor puede ser la diferencia entre un simple inconveniente o terminar en la cuneta.
De repente un estallido y luego, flap...flap...flap... en menos de un cuarto de segundo, su placentero viaje se convierte en un desagradable viaje.
La primera reacciÓn del conductor al escuchar semejante estruendo y sentir el auto halando hacia un lado, es de quitar el pie del acelerador, frenar y tratar de controlar el auto para detenerse a un lado de la vía. Desafortunadamente esta reacciÓn ha demostrado que puede ser peligrosa y dificulta mantener el control del vehículo.
Sin embargo, el conductor debe estar preparado para afrontar un reventÓn. Usted no estará listo si en una mano tiene una taza de café y la otra descansa sobre el timÓn. Estar sentado y tener el timÓn agarrado correctamente mejorará su reacciÓn para lidiar con un reventÓn.
Si usted experimenta un reventÓn, sin importar el vehículo que conduce el siguiente procedimiento es apropiado. Reaccione acelerando por un instante o manteniendo el pie en el acelerador, y así conservar el impulso. A la vez, trate de equilibrar gentilmente la direcciÓn con el timÓn para mantener el vehículo en la vía. Una vez haya estabilizado el vehículo, disminuya la velocidad lentamente y dirija cuidadosamente el auto hacia la orilla de la carretera.
Miembros del equipo de Tire Rack tuvieron la oportunidad de experimentar reventones a velocidades alcanzadas en autopistas en Laurens Proving Grounds de Michelin. Neumático tras neumático fue sacrificado luego que se le permitiÓ a los conductores manejar vehículos con explosivos en los neumáticos cuidadosamente instalados por profesionales. Estos explosivos fueron ubicados en los flancos o paredes del neumático (en un neumático trasero de un SUV y en el delantero de un sedán). Estos neumáticos fueron literalmente reventados.
LÓgicamente nuestros conductores sabían que el neumático iba ser detonado, pero el seguir el procedimiento previo les permitiÓ continuar en el carril y cuidadosamente reducir la velocidad. Básicamente los conductores aprendieron que en caso de un reventÓn debe tratarse de continu
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